Editorial

 

El sector inmobiliario residencial en Vigo y en la provincia de Pontevedra parece dejar atrás la recesión posterior a la crisis, y el aumento de ventas refleja un repunte de la demanda solvente que, sin las cifras de Madrid o Barcelona, permiten vaticinar un aumento de precios del suelo edificable y de la vivienda de obra nueva.

Los alquileres en Vigo se han situado entre los más elevados de España, lo que pone de manifiesto la escasez de oferta adecuada a las necesidades del comprador.

Puede parecer paradójico, pero la anulación del PXOM de Vigo de 2008 ha tenido un efecto perverso sobre el mercado, encareciendo los precios de la escasa oferta existente.

Para solucionar en parte dicha situación, el Concello de Vigo aprobó la Instrucción 1/2017 en virtud de la cual se establece que las licencias solicitadas con anterioridad a la notificación de la Sentencia del Tribunal Supremo que declaró la nulidad de las órdenes de aprobación del Plan Xeral de 2008 serán concedidas conforme a la normativa vigente a la fecha de su solicitud, y las posteriores conforme al planeamiento “revivido”, es decir el PGOU de 1993.

Dicha Instrucción viene a recoger el Dictamen-propuesta que había redactado como asesor jurídico de Aproin, en febrero de 2016 y que se entregó en la Xerencia de Urbanismo.

Por su parte la Xunta de Galicia ha incorporado en la Ley de acompañamiento de la de Presupuestos de 2017, una normativa que permite a los Ayuntamientos cuyo Plan Xeral esté anulado o suspendido, redactar una ordenación provisional.

La misma incluirá los suelos urbanos consolidados y en determinadas circunstancias también los no consolidados y urbanizables, y no le serán de aplicación las normas de la Ley del Suelo de 2016.

Desde APROIN aconsejamos a nuestros asociados que en la medida en que dichas normas les sean de aplicación no duden en solicitarlo ante la Xerencia de urbanismo; y pedimos a las Administraciones Local y Autonómica que cooperen con lealtad institucional tal y como establece la Ley.