informática

Christian Delgado Von Eitzen

ingeniero de telecomuncación_

 

¿Qué es el fog computing y qué es el cloud computing?

Para tener claras las diferencias entre fog computing y cloud computing, en primer lugar conviene definir en qué consiste cada concepto.

¿Qué es el cloud computing o computación en la nube?

El concepto de “nube”, computación en la nube o cloud computing ya se ha hecho bastante popular en la sociedad y conocido por el gran público.

Se refiere, simplemente, al hecho de utilizar recursos informáticos a través de Internet que no están ubicados en un servidor concreto de Internet, sino que hay uno o varios disponibles en centros de procesos de datos que, a nosotros, los usuarios, nos resulta indiferente, ya que es algo transparente y no percibimos si usamos el servidor A del servicio Z o el servidor B del mismo servicio Z.

Esos servidores que proporcionan los servicios cloud o en la nube “no se sabe dónde están” (pero pueden estar muy lejos físicamente), y para poder utilizarlos, hay que enviar la información a Internet, que la propagará desde su origen hasta el servidor de destino, lo que llevará más o menos tiempo según la distancia, la congestión de las redes y otros parámetros.

Un ejemplo de servicios cloud pueden ser perfectamente el uso de Siri, Amazon Alexa o Google Now cuando hablamos al aparato (por ejemplo, “¿Qué hora es?”), lo único que hace el aparato es grabar la voz y enviarla, a través de Internet, a servidores remotos que forman la nube de Apple, Amazon o Google respectivamente. En esos potentes centros de procesado de datos (mucho más que cualquier equipo doméstico) se analiza la información de la grabación (lo que dice la persona), se procesa y se devuelve una respuesta, que, en este caso de ejemplo, hace que el dispositivo en cuestión sepa que debe decir en voz alta la hora actual. Todo esto se hace en cuestión de fracciones de segundo.

¿Qué es el fog computing o computación en la niebla?

En el caso del cloud computing, se utilizan servidores remotos que físicamente pueden estar muy lejos del usuario. Por cuestiones de retardo en las respuestas y eficiencia, se intentan ubicar cerca de él, pero pueden encontrarse, por ejemplo, incluso en otro continente.

El fog computing aparece para mejorar la eficiencia en el procesamiento de ciertos datos que no tiene quizá sentido que viajen tan lejos cuando pueden ser procesados en algún servidor más cercano. Debemos tener además en cuenta que cada vez hay más dispositivos conectados a Internet y la tendencia es que siga en aumento de forma exponencial.

Por tanto, lo que hace el fog computing o computación en la niebla es procesar los datos en dispositivos “locales” que no se encuentran en Internet, sino que están más cerca físicamente: en el borde de la red (edge computing), mejorando mucho los tiempos de respuesta y actuando de forma más eficiente ya que no hay que enviar la información a través de Internet o, si hay que hacerlo, están «cerca» del usuario. Mucho más que la nube.

Esta manera de trabajar permite utilizar dispositivos poco potentes para captar datos (por ejemplo, un sensor inteligente de temperatura en una planta industrial), y que la información generada (que no puede ser procesada totalmente en el sensor) se analice en dispositivos con capacidad de cómputo que se encuentren en la misma red a la que se encuentra conectado, antes de llegar a Internet, y que incluso interactúe con otros dispositivos de la misma red para tomar decisiones.

Esa es, precisamente, la computación en la nube o fog computing, que como su nombre indica, es como la niebla, es decir, una nube (de ahí los nombres y la diferencia), pero mucho más cercana y que casi se puede “tocar”, más eficiente, más rápida en dar respuestas y permite incluso tomar decisiones en tiempo real.

A modo de ejemplo, si en una fábrica hay un sensor que capta datos de una máquina y la información determina que detener su funcionamiento de forma inmediata, parece razonable pensar que la respuesta será más rápida si la decisión se toma en un equipo local, transmitiendo la información dentro de la propia red que no enviando la información del sensor a la nube, analizando ahí y devolviendo la orden de ejecución a la máquina desde la nube.