interiorismo

 

Vamos a la playa: decoración para el verano

Llega el calor, el verano está aquí y tenemos la mente puesta en la playa y en las casas en las que disfrutamos de nuestras vacaciones.

Para desconectar de la rutina y del estrés hay que hacer que predomine la sencillez. Las casas de verano no deben estar abarrotadas de muebles y accesorios. Hay que dejar que transmitan paz, frescura y serenidad llenándolas de luz. Para ello, nada como aliarse con el blanco y sumar color con pequeños detalles en tonos azules o pastel.

Vamos a ver cómo con algunos detalles podemos meter el verano en nuestras casas.

No se trata de hacer grandes cambios, sino de buscar ciertos guiños decorativos.

La mezcla de distintos tonos y estampados en azules dinamiza la decoración. Evocan el mar y son el contrapunto ideal a la neutralidad del blanco. Los tejidos deben ser ligeros y transpirables, como el lino y el algodón. 

Los grandes ventanales invitan al exterior a formar parte de la decoración interior. 

Los materiales naturales como la madera y las fibras facilitan esa sencillez que debemos buscar en las casas de verano. Las lámparas y los espejos son elementos muy decorativos y funcionales. El espejo de la zona del comedor de esta vivienda multiplica la luz y consigue llevar las vistas al mar hasta el fondo del salón.

Pequeños detalles, como el menaje, complementan la decoración de las viviendas vacacionales. El verano permite ser más espontáneo y desenfadado a la hora de decorar la mesa. Tampoco pueden faltar en la decoración los motivos marítimos como las conchas o los corales.

Las alfombras también son para el verano, siempre que sean de fibras naturales y no tengan pelo largo. Hacen los espacios más acogedores. ¡Incluso puedes colocarlas superpuestas! 

El color blanco, unos cojines de rayas en tonos azules y alfombras de fibras naturales son suficientes para darle un toque muy veraniego a los dormitorios. 

Los muebles de ratán son ideales para las casas de verano por su sencillez y ligereza. 

El mar también puede entrar en la vivienda a través de cuadros o esculturas de pared.

En los baños, con materiales como la teca de este espejo, se puede conseguir un efecto marinero. La forma redonda del espejo evoca los ojos de buey de los camarotes de un barco.

Los más atrevidos pueden pintar elementos estructurales como las puertas, las contras o los marcos de las ventanas en color azul turquesa y conseguirán un efecto verano espectacular. 

Me encanta decorar casas de verano. Las maderas y las fibras naturales, los tonos claros, los verdes agua, los azules, los textiles en lino y algodón… Todo lo que me gusta es lo que piden estas casas.

¡Feliz verano!