tasaciones

Susana de la Riva

directora de comunicación y marketing_ tinsa_

 

Las zonas rurales ganan peso en el mercado residencial

Cumplido ya año y medio desde que estallara la crisis sanitaria del covid, el mercado residencial no solo se ha recuperado tras los ajustes registrados en el segundo semestre de 2020, sino que está mostrando señales de dinamismo, tanto en operaciones como en precios. Salvo excepciones en mercados localizados, la recuperación en ‘V’ es un hecho e, incluso, se han superado los precios y las cifras de ventas de finales del año 2019. En el caso de la provincia de Pontevedra, por ejemplo, observamos que el precio medio de la vivienda nueva y usada se situaba en el tercer trimestre de 2021 en 1.190 euros/m2, un 3,6 % más que en el cuarto trimestre de 2019.

Pero no puede decirse que la crisis haya sido simplemente un paréntesis. La excepcional situación vivida ha dejado huella en los demandantes y, en consecuencia, también en las dinámicas del mercado. Algunos de estos cambios todavía permanecen, mientras que otros ya han empezado a revertirse.

Uno de ellos es el interés por ubicaciones fuera de las ciudades. El deseo surgido durante el confinamiento de escapar de zonas densamente pobladas, con mayor riesgo de contagio, unido a la generalización del teletrabajo en esos primeros momentos ha provocado que parte de la demanda pusiera sus ojos en zonas alejadas de las capitales y las grandes ciudades, un movimiento del que dan cuenta la actividad de valoración desarrollada por Tinsa en este periodo.

El peso de las tasaciones de vivienda en la provincia de Pontevedra ubicadas fuera de las dos grandes ciudades (Vigo y Pontevedra) se incrementó dos puntos porcentuales entre 2019 y 2020, hasta un 57,3 %. Una tendencia que está teniendo continuidad este año: en los nueve primeros meses de 2021, el 60,2 % de las tasaciones realizadas por Tinsa en la provincia de Pontevedra se han ubicado fuera de las ciudades de Pontevedra y Vigo. O, visto desde el otro lado, el protagonismo de las dos principales urbes en las tasaciones de vivienda terminada se ha reducido en casi cinco puntos porcentuales desde 2019.

Otro de los cambios observados como consecuencia de la pandemia parece ser más efímero: el aumento de la superficie media de las viviendas y el protagonismo de la vivienda unifamiliar. La superficie media de las viviendas nuevas y usadas tasadas por Tinsa en la provincia de Pontevedra aumentó un 2 % entre 2019 y 2020, al pasar de 152 a 155 m2, con picos de hasta 170 m2 en el segundo trimestre el año.

A ello contribuyó la actividad en el segmento unifamiliar, que concentró más del 40 % de las tasaciones de vivienda realizadas por Tinsa en el segundo trimestre de 2020 en la provincia de Pontevedra, frente a la media del 35 % del año anterior. La búsqueda de más espacio y, de nuevo, ubicaciones alejadas de los núcleos urbanos estarían impulsando esta tendencia, junto a la circunstancia de que fue la demanda más solvente la primera que se movilizó tras el shock pandémico.

Sin embargo, en 2021 tanto la superficie media como la proporción de vivienda unifamiliar y plurifamiliar parecen estar retornando hacia los valores previos a la pandemia o, como mínimo, han experimentado un freno, en línea con la tendencia observada tanto en el conjunto de Galicia como en España. Y es que desde la primavera se ha incrementado el volumen de compradores de vivienda activos en el mercado debido a la mejora de la confianza y de las previsiones económicas. Unos demandantes de vivienda que amplían el abanico de producto residencial, en función de su poder adquisitivo.