Aproin Digital 160 / De viaje como viajeros  

de viaje como viajeros

Manuel Fernández Díaz

director de viajeros del mundo_ _

 

Canadá este (de Toronto a Montreal)

Montreal

Canadá es un país soberano en América del Norte, cuya forma de gobierno es la monarquía parlamentaria federal, teniendo por soberana a la reina de Inglaterra. Hablamos del segundo país más extenso del mundo después de Rusia, y también el más septentrional, con un territorio organizado en diez provincias y tres territorios, siendo su capital la ciudad de Ottawa, aunque la  más poblada es Toronto.

Se extiende desde el océano Atlántico al este, el océano Pacífico al oeste, y hacia el norte hasta el océano Ártico. Al sur limita con los Estados Unidos, y al noroeste Alaska. A causa de su climatología extrema (tremendos fríos en invierno, con promedios de –20 grados centígrados), es uno de los 15 países menos poblados del mundo, con aproximadamente 4 habitantes por kilómetro cuadrado, haciendo un total de algo mas de 37 millones.

De este inmenso país ( casi 10.000 millones de kilómetros cuadrados, por solo medio millón de España), nuestro reportaje de hoy se centrará exclusivamente en el lado este de Canadá, cerca de los grandes lagos y de la vertiente Atlántica del país. Nos acercaremos a las provincias de Ontario y Quebec, donde se hallan sus mas importantes poblaciones, y a donde les aconsejamos dirigir sus pasos en un primer viaje a la incomparable Canadá.

Toronto

El punto de llegada natural, si usted vive en Galicia, debería ser Toronto, que entre mayo y octubre suele mantener vuelos directos con nuestra vecina Oporto. Se trata de la mayor y mas poblada ciudad del país, con cerca de 2.700.00o habitantes. Toronto es también la capital de la provincia de Ontario, y se considera el centro de la cultura anglófona canadiense.

Comenzando la visita a la ciudad, cerca de su bellísimo edificio Iron Building (del que hay una replica ampliada en N. York), se halla el mercado tradicional de St Lawrence, y, coincidirán conmigo que un mercado es el espejo fiel de la cultura y la educación de un país. Tras visitarlo, no tendrán ninguna duda de que Canadá es un país rico, organizado y culto. Por momentos, tendrán la sensación de estar en el mercado de la Boquearía de nuestra Barcelona. En el fundamentalmente se ofrecen frutas y hortalizas, lácteos y quesos (algunos de gran calidad), pescados y mariscos, y por supuesto vinos entre los que la estrella sería el famoso vino de hielo canadiense.

En el exterior, verán una ciudad mezcla de clásica y moderna, y en medio de sus modernos y altos edificios, construidos entre jardines, destacará la catedral anglicana de Saint James, una obra clásica construida en 1803 por donación popular.

En sus jardines, como en tantos jardines canadienses, ardillas negras o castañas campan a sus anchas sin que la presencia del hombre les preocupe demasiado.

La Universidad de Toronto es la mayor Universidad de Canadá. Atrae a estudiantes de todo el país, y a un gran numero de estudiantes extranjeros. Aquí se han graduado cuatro Primeros ministros de Canadá, dos gobernadores generales, numerosos líderes de negocios, y académicos de reconocido prestigio internacional. Cuenta con el mayor número de ganadores del Premio Nobel de entre las universidades canadienses. Su precioso edificio y amplio campus antiguo, está ubicado en el centro de la ciudad, y fue inaugurado en marzo de 1.827.

Pero el principal icono de la ciudad de Toronto es la Canadian National Tower, o simplemente la Torre CN como es conocida internacionalmente. Con sus 554 metros de alto, es la estructura no sostenida por cables, la cuarta más alta del mundo tras el Burj Khalifa de Dubai, el Tokyo Sky Tree y la Torre de televisión de Cantón. Para la Sociedad Americana de Ingenieros Civiles, es considerada como una de las Siete Maravillas del Mundo moderno. El piso de vidrio desde la ultima planta, puede aguantar un peso de 4.137 kg, más o menos 14 grandes hipopótamos.

Cataratas del Niagara

A tan solo 130 kms de distancia de Toronto, por magnificas autopistas gratuitas, se halla la ciudad de Niagara Falls, acostada sobre el río Niagara, y donde se ubican las famosísimas cataratas del mismo nombre, las bellísimas y super conocidas Cataratas del Niagara.

Al entrar en la ciudad, sorprende la esbelta y bonita Torre Skylon, con 165 metros de altura, autentico mirador privilegiado sobre las cataratas, que en su planta principal, cuenta con un interesante restaurante panorámico que lentamente gira sobre si mismo, lo que permite disfrutar del espectáculo formado por cataratas, río, las dos ciudades acostadas sobre el San Lorenzo ( la canadiense y la yankee), mientras todo permanece tendido a sus pies!

La pequeña ciudad canadiense de Niagara Falls, con apenas 55.000 habitantes, es una bella y rica ciudad turística, rodeada de todo lo que pueda facilitar las distintas posibilidades de disfrutas de las cataratas (helicóptero, avioneta, ala delta, barco de vapor, lanchas neumáticas… etc).

El río Niagara es un caudaloso pero corto río de tan solo 52 kilómetros de largo, que comunica el Lago Erie con el Lago Ontario, entre los Estados Unidos y Canadá. Y a mitad de camino entre uno y otro se producen estas impresionantes y majestuosos Cataratas del Niágara, con una caída de aproximadamente 52 metros. Realmente se producen tres cataratas: las mas importantes son las canadienses, de nombre Ontario, seguidas por las estadunidenses, llamadas Nueva York, y las «cataratas Velo de Novia» más pequeñas. Son las cataratas más voluminosas de América del Norte, y por ellas pasa toda el agua de los Grandes Lagos. En la mitad del curso del río Niagara, antes de desplomarse, y separando la catarata canadiense y la americana, se encuentra la conocida como Isla de la Cabra

El nombre «Niágara» es originario de una palabra indígena que significa «trueno de agua». Los habitantes originarios de la región eran los ongiara, una tribu iroquesa a la que los conquistadores franceses llamaron los neutrales, y que fueron quienes les ayudaron como mediadores en disputas con otras tribus.

La mas tradicional y mítica manera de visitar estas cataratas, es a bordo de uno de los barcos de vapor conocidos como Maid of the Mist, la Doncella de la Niebla, el mítico barco que desde 1.846 recorre estas cataratas. El continuo ir y venir de barcos de la flota Maid of the Mist por la ensenada de Niagara, no cesa ni un solo minuto durante toda la mañana. Aquí cada día se congrega un numero de visitantes no alcanzado por ninguna otra catarata del planeta. Protegidos por los inconfundibles impermeables azules que facilitan al embarcar, el paseo les adentrara en la gran herradura que durante cientos deaños ha ido construyendo esta tremenda catarata… Sobre la pequeña estación fluvial de la Doncella de la Niebla, continuamente montones de turistas forrados de azul se aprestaran a ocupar su lugar abordo.

Niagara on the lake (Niagara sobre el Lago)

En el camino de regreso hacia Toronto para continuar la visita al país, aconsejamos desviarse muy poquito para visitar una pequeña ciudad, ocupada por bellísimas calles de viviendas unifamiliares, sobre bellos jardines muy verdes, y llenas de simpáticas ardillas:

Niagara on the Lake es una preciosa ciudad, casi de cuento de hadas, situada en la provincia canadiense de Ontario, a las orillas del Río Niágara y del Lago Ontario. Entre 1792 y 1796 sirvió como capital de la colonia inglesa de Canadá Inferior, pero dada su proximidad a la frontera con EEUU, consideraron mas conveniente trasladar la capital al centro del país. El nombre actual fue adoptado en torno a 1880, para diferenciarse de las Cataratas del Niágara. En la actualidad tiene una población próxima a los 15.000 habitantes.

Es de destacar la vinculación de esta ciudad y el dramaturgo irlandés Bernard Shaw, en cuyo honor, cada verano desde 1962 se celebra un importante festival de teatro con fama internacional.

Mil Islas (Río San Lorenzo)

En menos de una hora por carretera, podrán llegar al pequeño puerto fluvial de Rockport, a orillas del río San Lorenzo, a apenas 25 kms de su nacimiento. Aquí se inicia una bellísima excursión fluvial conocida como Mil Islas, que recorre los cientos de islas e islotes que forman un archipiélago en el curso superior del río San Lorenzo, en la frontera entre Estados Unidos y Canadá.

El archipiélago está compuesto por 1.700 pequeñas islas, de las cuales la mayoría están en el sureste de la Provincia de Ontario ( Canadá), y el norte del Estado de Nueva York, en los Estados Unidos. Una gran cantidad de estas islas son privadas.

En 1914 fue creado el Parque Nacional Islas San Lorenzo por Canadá, que integra veintitrés de ellas y otros pequeños islotes. La isla mayor es la isla Wolfe, con una superficie de 127 km2 . Las islas son conocidas como un lugar de vacaciones desde mediados del siglo XIX. Pero esta región de las 1000 Islas, fue habitada originalmente por tribus indígenas conocidas como la; Confederación de los iroqueses, que estaba formado por las tribus; Mohawk, Oneida, Onondaga, Cayuga, y Seneca, cuyo medio de vida era la agricultura. Cultivaban maíz, frijoles y calabaza. Además cazaban en los bosques y pescaban en lagos y ríos. El nombre de Mil Islas se lo dieron los franceses en el siglo XIX, pero anteriormente, los indios más agudamente llamaron a esta zona el Jardín del Gran Espíritu de Manitou.

El Río San Lorenzo es uno de los más grandes del mundo y está surcado por gran cantidad de barcos, siendo el mejor acceso desde el Océano Atlántico a la región de los Grandes Lagos.

El paseo en barco por el río San Lorenzo, además de bellísimos, nos ayudará a conocer y distinguir las sutiles diferencias entre canadienses y estadunidenses.

Ottawa

Y a tan solo hora y media de viaje, estarán llegando a la capital de Canadá: Ottawa, ubicada en el extremo sureste de la provincia de Ontario, a orillas del río Ottawa, que conforma la frontera entre las provincias de Ontario y Quebec, partes inglesa y francesa respectivamente. De un lado del río la capital Ottawa,de habla inglesa, y del otro lado del puente, y pegada a ella, la ciudad de Gatineaux, donde el idioma es el francés

En su precioso museo de las civilizaciones pudimos contemplar estos fantásticos tótenes sobre un decorado de bosques. Con buen criterio, aquí también se escenifica la convivencia pacifica entre su población occidental, representada por la famosísima Policía Montada del Canadá, los descendientes de los indios algonkinos, y los innuis del norte del país.

En el centro de Ottawa finaliza el Canal Rideau es un sitio navegable que forma parte del Patrimonio Mundial de la Humanidad, y que conecta la ciudad de Ottawa (a la que divide en dos) , con la ciudad de Kingston en el Lago Ontario. La ruta consiste en una combinación de varios lagos, numerosos ríos y represas, así como 19 kilómetros de canales hechos por el hombre, y debiendo atravesar 45 exclusas.

Pero si hay un monumento que identifique a esta preciosa ciudad, capital de la nación canadiense, sin duda es el Parlamento de Canadá. Está localizado en la Colina del Parlamento, donde, el 1 de septiembre de 1860 Eduardo VII, príncipe de Gales, colocó la primera piedra. Los 3 edificios neo-renacentistas con sus torres, fueron construidos poco después de que la Reina de Inglaterra decidiese situar la capital en Ottawa. Se ven prácticamente desde toda la ciudad, siendo una de sus atracciones principales. Durante todo el verano, cada día a las 10 de la mañana, frente al edificio se celebra una de las ceremonias de cambio de guardia mas espectaculares y cuidadas del mundo, que, si tienen oportunidad, les aconsejamos no perderse.

Actualmente, según el Acta de la Norteamérica británica de 1867, el Parlamento de Canadá está constituido por el Monarca de Canadá, el Senado, y la Cámara de los Comunes. La reina de Canadá, a día de hoy, es su majestad la reina Isabel II de Inglaterra, que representa uno de los tres componentes de su Parlamento. A partir de aquí uno se explica la tremenda vinculación del pueblo canadiense con el imperio británico.

La Basílica Catedral católica de Notre Dame de Ottawa, se finalizo en 1844, y para finalizar la obra mandaron venir desde Francia al Padre Telmon, que la remato con un precioso estilo neogótico.

Por ultimo, para nuestro gusto de experimentados viajeros del mundo, uno de los mas destacables rincones de Ottawa lo encontramos en su coquetísimo mercado Bay, un mercado callejero de flores, frutas, hortalizas, y verduras que parece diseñado por un pintor. Cada fruta de un color, cada hortaliza de un tono, se combina con otro de tal manera que aquí nada desentona.

Parque Omega

Continuando camino por el territorio francófono de la provincia de Quebec, se llega al Parc Omega, un parque de safari situado en Notre-Dame-de-Bonsecours. A lo largo de un recorrido de doce kilómetros y 1.500 acres de extensión, la naturaleza nos muestra sus lagos, prados, pequeños valles, bosques y colinas rocosas. Antes de iniciar el recorrido, en la tienda del parque, podrán comprar bolsas de zanahorias que les serán muy útiles a lo largo del recorrido. Este es el hogar de gran parte de la fauna de este inmenso país: alces, wapities, ciervos, osos, jabalíes, mapaches, castores y lobos. En esta época del año, de sol y vacaciones infantiles, la concurrencia es enorme, y los cérvidos llegan a perder completamente el miedo a acercarse a los coches para pedir comida… zanahorias, recuerdan?

El parque esta dividido en zonas ocupadas por animales compatibles, procurando que cohabiten entre si, especies que no se hagan daño. Así las ocas, los ciervos y los castores, si pueden convivir con los búfalos, pero no con los lobos.

Los alces en verano no resultan fáciles de ver, pues huyen del calor, y se refugian en la penumbra del bosque. Bambi, sin embargo es amigo del sol y de la luz, y se exhibe sin ningún cuidado. La cabra montés del Canadá lleva muchos años ligada a este parque, y su descaro es tal, que puede llegar a subirse a un autobús turístico…buscando sus zanahorias.

Pero sin lugar a dudas, el animal mas perseguido por los objetivos de nuestras cámaras era el oso negro, y aquí resulta sencillo encontrarlo. Esta especie de libertad vigilada que aquí disfrutan, no debe de ser la autentica aspiración de un oso negro, pero sin duda viven mucho mejor que en un zoológico.

Quebec

A las pocas horas de recorrer las buenas carreteras de la provincia de Quebec, se llega a la que, quizás, se convertirá en la ciudad favorita de casi cualquiera de ustedes: Quebec. En su plaza de armas, frente al río San Lorenzo, junto a su inigualable Castillo de Frontenac, y a los pies de la estatua a Samuel de Champlain, se puede comenzar la vista a Quebec, desde 1985 patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La ciudad fue fundada en julio de 1608 por Samuel de Champlain, un navegante, cartógrafo, soldado, explorador, diplomático y cronista francés, considerado el «padre de la Nueva Francia».

Desde la base del Castillo Frontenac, a sus pies podrán contemplar la parte baja de la ciudad, a orillas del río San Lorenzo, y su barrio mas famoso, conocido como le Petit Champlain, con ese ambiente destacablemente francés y latino que tanto nos gusta. Podrán llegar hasta él descendiendo una escales de piedra, a la que se conoce como escalera rompe cuellos, por lo fácil que resulta resbalar y caerse al transitarla. Se accede directamente a la calle central que da nombre a este barrio conocido como Petit Champlain. El gran auge comercial, y este aspecto de ciudad antigua europea pero dentro de América del Norte, han convertido a esta zona, en la favorita de los viajeros que visitan Quebec.

En la Plaza de la Victoria nos sorprende un busto en honor de Luis XIV, quien en 1663, se hace cargo directamente de la colonia e implanta una verdadera administración colonial, nombrando a Quebec capital de la Nueva Francia. En su afán por llenar de franceses el territorio, y dada la absoluta carencia de mujeres sobre el nuevo territorio, envía allí a su propia hija para animar a las francesas a imitarla.

Visitando el Viejo Québec, en su Place-Royale, deberán detenerse ante los Québécois Fresque des Côte de la Montagne, un mural de mas de 400 metros cuadrados, donde se representan muchos personajes históricos de Quebec; hasta 15 personajes verán aparecer asomados a las ventanas, puentes y elementos de una "supuesta" calle de Quebec. Por ultimo, fíjense que también aparece Filipe Lecrer, creador de la canción quebequoise. Esta especie de gigantesco trampantojo, es realmente un trabajo impresionante que ningún visitante debería perderse.

Y para los mas cómodos, las partes alta y baja de la ciudad vieja, también disponen de un funicular que puede liberar a quebequenses y visitantes de tener que utilizar la famosa escalera rompe cuellos.

Al margen de este bellísimo barrio antiguo e histórico, Quebec constituye una bonita, bien trazada y rica ciudad, con algo mas de 600.000 habitantes, que constituye para todos los canadienses francófonos, su capital espiritual.

Montreal

La ultima parada que les proponemos en este interesante viaje por la Costa Este de Canadá, será Montreal, la ciudad mas importante de la provincia de Quebec, y la segunda mas poblada de todo Canadá, con cerca de 2 millones de habitantes..

Accederán a ella a través de la autopista transcanadiense de mas de 8.000 kms de largo Ya en los suburbios de Montreal comienzan a aparecer las importantes obras inauguradas con motivo de las Olimpiadas de 1976. Destaca el estadio olímpico, al que los montrealenses llaman con buen humor el cenicero, pues, además de su forma, fue pagado con un impuesto especial sobre el consumo del tabaco.

A través de diversos puentes se va entrando en la isla de Montreal, pasando primero por la isla artificial de Notre Dame, donde cada año tiene lugar en el Circuito Gilles Villeneuve, el gran premio de formula 1 de Canadá.

La visita a la ciudad podría comenzar por el ayuntamiento, de estilo Segundo Imperio, edificado en 1878, situado en el centro del Vieux-Montreal, frente a la Plaza Jacques-Cartier. Desde su balcón, en 1967, el general de Gaulle, presidente de Francia, lanzó su célebre grito “Vive le Québec libre!” (Viva Quebec libre) al final de su discurso, causando un gran escándalo mundial.

Frente al viejo puerto de Montreal se ubica la Torre del Reloj, originalmente llamada The Victoria Pier, edificio pintoresco, cuya primera piedra fue colocada El Príncipe de Galles en octubre de 1919.

La isla artificial de Notre Dame, se construyó aprovechando la tierra extraída de la construcción del metro, y aquí se ubico en 1967 la Feria Internacional, en la que se ubica una fantástica bola del mundo. También aquídesde su Parque Jean Drapeau, al que los montrealenses vienen a pasear, se puede disfrutar de unas magnificas vistas de la ciudad.

Debido al intenso frío que aquí se registra durante todo el invierno (promediando los – 20º) Montreal disfruta de la mayor y mas bella ciudad subterránea del mundo. Una red de túneles que conectan edificios del área central de una ciudad, como por ejemplo edificios de oficinas, centros comerciales, estaciones de tren y metro, teatros, y otras instalaciones. Normalmente se accede a la ciudad subterránea a través del espacio público de cualquiera de los edificios que conectan con ella, y a veces también dispone de entradas separadas. Solo entrar, podrán encontrarse con una pista de patinaje sobre hielo, y siguiendo escaleras abajo, todo un entramado de calles y placitas, que les irán introduciendo en las plantas subterráneas que tienen todos los mas importantes centros comerciales.

La Basílica-Catedral de María Reina del Mundo y de Santiago es la tercera mayor iglesia de la provincia de Quebec, y se sitúa en pleno centro de Montreal, en el distrito de Ville-Marie. La construcción empezó en 1875, y en 1955, fue reconsagrada a María, Reina del Mundo por el papa Pío XII, como catedral católica. En su fachada destacan las estatuas de los doce apóstoles.

A través de la rue Saint Laurent, otra importante calle comercial, podrán introducirse en el populoso y étnicamente exclusivo barrio chino, China Town, que de inmediato les trasladará al ambiente de cualquier barrio de una autentica ciudad China. No deberán sorprenderse si, en cualquier patio del barrio, se encuentran con gran numero de hombres y mujeres de cualquier edad, disciplinadamente uniformados de rojo, practicando bailes de cualquier tipi… por ejemplo un cha cha cha latino

Al final del Bd Saint Laurente, por la rue Saint Antoine, se desemboca en la Plaza de Armas, frente a la Basílica de Notre Dame, presidida por una estatua al Sr Maisonave, fundador de Montreal en 1642, A los pies del conjunto escultórico se recogen el momento de la firma del tratado de la creación, y representaciones de los indígenas que habitaban el territorio

Montreal es sin duda la ciudad mas cosmopolita y abierta de este enorme país. Aquí viven ciudadanos de todo el mundo, que con cierta lógica, se concentran por nacionalidades. Por supuesto, también existe un barrio en el que el idioma mayoritario es el español, aunque fundamentalmente de centro América. Y metros mas adelante, el barrio indio, con sus tiendas especializadas en su exclusivo tipos de comidas. Muy importante, y con muchos miles de habitantes, es el barrio portugués, pues aquí la colonia de emigrantes portugueses, que comenzó a establecerse hace mas de 50 años, han formado una población estable que ya sobrepasa la tercera generación.

Desde el aeropuerto internacional de Montreal, durante gran parte del año, también se disfruta de vuelos directos a la ciudad de Oporto, lo que les permitirá iniciar un cómodo vuelo de regreso.